Los Remedios Homeopáticos se preparan poniendo la planta medicinal u otra sustancia a maserar en alcohol para así obtener una tintura. De esta tintura se toma una parte y se le añade 9 o 99 partes de agua para obtener las potencias 1:10 y 1:100. La mezcla de tintura y agua se agita fuertemente. De esta mezcla se toma 1 gota y se mezcla con 9 o 99 gotas de agua y se agita de nuevo. Así se sigue sucesivamente potenciando el Remedio Homeopático, a base de mezclar con agua y agitar la solución. Según más se diluye el preparado más aumentan sus propiedades curativas.
Los Remedios Homeopáticos se clasifican con números romanos para especificar cuantas veces han sido diluídos, por ejemplo: 10X implica que la solución ha sido diluída 10 veces en la proporción de 1:10. 10C implica una solución diluída 10 veces en la proporción 1:100. Con el líquido obtenido se hace el Remedio Homeopático, añadiendo la solución a grágeas de lactosa, aunque se pueda tomar líquida directamente depositando gotas de la misma debajo de la lengua.
Como hemos visto, el Remedio Homeopático se hace más potente cuanto más lo diluímos, una solución diluída 100 veces es más potente que una diluída 10 veces. Cuanto más se diluye la solución menos posibilidades existen de que se encuentre en ella moléculas de la planta o sustancia medicinal; pero como sabemos que el agua tiene las propiedades de extraer y almacenar las Energías Sutiles, sabemos entonces que las Energías Sutiles de la sustancia medicinal se han almacenado en el agua de la solución homeopática.
Así pues, los Remedios Homeopaticos son realmente Remedios de Energía Sutil, que contienen la energía de la planta, lo que se llama "Signatura Energética". El Remedio Homeopático afecta los Sistemas de Energía Sutil del paciente y así pues al Cuerpo Físico.
El Arte de tratar enfermedades con Homeopatía se basa en la sintonización de frecuencias energéticas del Remedio Homeopático y la frecuencia energética del paciente enfermo o enfermedad, para así estimular el organísmo del paciente a sanarse por sí mismo. La Sanación se obtiene gracias a la Ley de Resonancia, el paciente recibe la cantidad, frecuencia de Energía Sutil necesaria para que el organísmo vuelva a una frecuencia energética de salud y bienestar.
Hay que decir que el Homeópata trata a la persona por completo, no solo su aspecto físico sino también sus aspectos mentales y emocionales, para así poder sintonizar mejor con la frecuencia vibracional de la enfermedad y su cura.
Por último decir que la Homeopatía es una Medicina Energética, Sutil, Etérica, Vibracional.