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| Sahumerios de Sándalo limpian el entorno de energías negativas |
Antes y después de cada sesión de Gemoterapia se deberán limpiar los cristales de cuarzo que lo necesiten y el medio ambiente donde se desarrolle la sesión.
La habitación que se utilice para la terapia deberá estar bien ventilada, preferiblemente que sea soleada. La atmósfera se limpiará de energías negativas (psíquicas, emocionales,etc.) que se liberen durante la sesión con inciensos de Sándalo, Cedro y/o Salvia. También ayuda encender velas blancas y tener Drusas de Cuarzo Transparente en cada esquina de la habitación.
Queda claro que la habitación deberá ser tranquila y poco ruidosa.
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| Un Generador en la mano izquierda protege al Gemoterapéuta |
El terapeuta se protegerá sujetando un Generador de Cuarzo Transparente en su mano izquierda con la punta dirigida hacia afuera para repeler las energías no deseadas. El visualizar una burbuja de luz blanca que envuelve al paciente y terapeuta, así mismo un rayo de luz blanca que atraviesa al terapeuta desde el chakra Corona hasta el chakra Base y sigue por los pies camino abajo hasta la "tierra" (en cada respiración), protegerá al terapeuta y amplificará sus energías sanadoras.
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| El paciente se situará en posición de cubito supino |
El cliente se deberá de tumbar boca arriba, preferentemente desnudo de la cintura hacia arriba, si no, sería conveniente que el paciente llevara puestas ropas claras de material natural, como algodón, seda o lana.
Las sesiones suelen durar unas dos horas, aunque será la intuición del terapeuta la que pondrá punto final a la sesión.
El terapeuta deberá conversar con el paciente y averiguar cuales son los motivos de su visita, intentando al mismo tiempo descubrir que chakras, partes del cuerpo, etc. están desequilibradas o enfermas, para más tarde durante la sesión obrar en consecuencia.
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| El Gemoterapeuta escuchará al paciente y hará un diagnóstico |
El terapeuta deberá también guiar la respiración del paciente durante la sesión (respiración abdominal relajada y tranquila), para que el paciente se relaje y pueda sintonizar con las energías curativas de cristales y piedras. Si la respiración no es completa, es prueba de un bloqueo ahí donde la respiración termine. En esta respiración es beneficioso que el terapeuta ayude al cliente a visualizar luz dorada que atraviesa la línea central del cuerpo desde el chakra Corona hasta el chakra Base (inhalación), al exhalar el paciente visualizará como sus tensiones se desvanecen. Este ejercicio alinea los chakras y estimula el sistema nervioso y de meridianos.
No está de más decir que el paciente mantendrá los ojos cerrados.
Cuando el paciente respira profundamente y de forma tranquila se comienza la terapia.