lunes, 22 de abril de 2013

Los Colores en una Sesión de Sanación. Una Guía

Los Colores son Luz, Energía, Vida, Sanación. Herramienta del Sanador

En una Sesión de Sanación se utilizan todos los colores del espectro para sanar, cargar y equilibrar el Sistema de Chakras Mayores, pero los colores también se pueden emplear de otras forma  ya que poseen propiedades terapéuticas.

El color rojo se utiliza para cargar energéticamente el campo aural, para "quemar" el cáncer y para calentar cualquier zona corporal o energética falta de energía.

El color Naranja tiene propiedades inmunitivas, aumenta la potencia sexual y la vitalidad, el vigor, la fortaleza en todos sus aspectos; además también carga el aura con energía.

El color Amarillo despeja la mente, aportando claridad mental, perspectiva, buena memoria y concentración.

El color verde equilibra, relaja y sana cualquier parte u órgano del cuerpo físico y cualquier estado patológico, así sea mental, emocional o sentimental. No usar en casos de cáncer, tumores, etc.

El color Rosado ayuda a sanar todos los campos del Aura, todos los chakras, todas las enfermedades y disfunciones físicas, y todos los desequilibrios sentimentales y emocionales. No debe de faltar en el "botiquín" de primeros auxilios del Sanador

El color azul es calmante, refrigerante, anti inflamatorio, y reestructura el Cuerpo Etérico (plano del cuerpo físico) dañado quizás por accidentes.

El color Añil relaja la mente, abre el Chakra del Tercer Ojo, mejora la visión y la visualización.

El color Blanco tiene propiedades sedantes, purificadoras, protectoras; además aporta paz, equilibrio y y serenidad. Carga el Aura con energía positiva.

El color Dorado y Plateado cargan y sanan el Cuerpo Aural más elevado: El Cuerpo Divino. También protege y eliminada virus y bacterias dañinas del organismo (son antisépticos). Poderosos protectores espirituales.

El color Negro Aterciopelado transmite paz, sosiego, serenidad y estado de gracia o plenitud.

El color Purpura es sedante y se utiliza para tratar enfermedades psíquicas.

Damián Alvarez