jueves, 30 de noviembre de 2017

La Oración del Padre Nuestro. Nuestro, Nosotros, Nuestras, Nos

Padre de todos, todos, todos Nosotros que estás en los Cielos

"Padre nuestro que estás en los cielos, ...
Venga a nosotros tu reino, ...
El pan nuestro de cada día dánoslo hoy, ...
Perdona nuestras deudas, ...
No nos dejes caer en la tentación, ..."

He acentuado con "negrita" en el texto anterior aquellas palabras que nos "envuelven" a todos los seres humanos como "uno" para que se den cuenta de lo que quiero decir.
Está totalmente claro que la "Oración del Padre nuestro" no fue diseñada para peticiones individuales, egocéntricas, vanidosas, orgullosas, egoístas, sino para peticiones transcendentales, así transciendan hacia todos los demás seres humanos como hacia seres espirituales superiores: Dios mismo, Su Nombre, Su Reino, Su Voluntad.

Venga a todos, todos, todos Nosotros tú Reino

Lo anterior expuesto confirma la idea que siempre he tenido de que todas aquellas personas que se creen estar más desarrolladas espiritualmente que los demás porque a ellos "les van bien las cosas" y a los demás no, son solo unos pobres egoístas, farsantes, hipócritas, porque (siempre lo he pensado y lo he dicho),  ¿cómo te puedes sentir bien mientras se mueren de hambre diariamente 6.000 seres humanos?.

La "Oración del Padre Nuestro" contiene más secretos y más claves que palabras. Esto es precisamente posible porque es una oración transcendental, y no solo porque trascienda al ser humano como individuo elevándole la conciencia convirtiéndolo en un "yo superior" sino porque se trasciende a sí misma llegando mucho más allá que las palabras que la componen.

El Pan de todos, todos, todos Nosotros dánoslo Hoy a todos

"Nuestro", "nosotros", "nuestras", "nos",  nos convierten en una unidad inseparable. Todos somos uno, individualizados pero no separados. Todos provenimos de la misma fuente, y el sufrimiento de nuestro prójimo es el nuestro propio. Por lo tanto, (siempre será así aunque el "maligno" nos intente convencer de lo contrario), la "Oración del Padre Nuestro" está dedica para todos, instruyéndonos además en cómo se debe de orar: Todo es para todos siempre, así sea bueno o malo, del universo o de la humanidad no nos podemos separar o salir. Así pues, cuando le pidas a Dios pídele a nuestro Padre y pídele para todos nosotros.
Entiende que la bendición de tu vecino es la tuya propia porque todos somos uno y todos formamos el todo.

Damián Alvarez



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