jueves, 21 de febrero de 2019

Metafísica de los Oídos (Segunda Parte)

Si no Escuchas por mucho que Oigas no podrás Entender y Aprender

Lo tienes que escuchar primero para poder entenderlo si lo quieres aprender. El oído es uno de los sentidos que más se utilizan en el aprendizaje. Si no escuchas no aprendes, si no aprendes no te desarrollas.

No escuchar a Dios, no escuchar las señales que te envía tu cuerpo, no escuchar la naturaleza, no escuchar tu intuición, no escucharte a ti mismo, no escuchar tus propias palabras ("no sé ni lo que dije"), hará que tu vida se estanque en lo que escuchaste y aprendiste en antaño cuando si estabas predispuesto a escuchar. Sabemos que la vida es dinámica, desarrollo eterno.

Por otro lado existen personas que solo desean escuchar lo que les interesa. Algunos escuchan solo por un oído y cierran el otro, solo se escuchan a sí mismos, o en cambio, solo atienden lo que los demás le dicen depreciando su propia comunicación interior.

Hasta tan solo por Curiosidad podemos Acentuar el Oído

Ponerle un filtro virtual al pabellón auditivo también es un clásico: "Si son buenas noticias las quiero escuchar si no, no". Quizás no se desea escuchar el pasado, la vida, los problemas de los demás ("no vengas a "comerme la oreja""), los problemas del mundo, no quiero saber nada del futuro, etc.

Por otro lado, las frustraciones, sobre todo en la infancia, como nombré al comienzo de este capítulo, marcan en grado sumo la manera de escuchar o no escuchar a lo largo de la vida: Nadie te escuchaba cuando eras pequeño, no te escuchaban porque eras niña, adolescente, mujercita ("cuando las mujeres hablan la cagan", no exagero, de verdad, o "cada vez que abres la boca "metes la pata", esto son cosa de mayores que los niños no tienen porque escuchar", "esto a ti no te interesa que eres pequeño".

La educación paterna traumatizante y frustrante a la vez, tampoco ayuda al infante en el desarrollo de su capacidad de escuchar: "Niños que casi literalmente cierran sus oídos para no escuchar los gritos de los padres", "este niño no escucha lo que se le dice", "escucha a todos los demás menos lo que le dicen los padres", "este niño solo escucha lo que le interesa", "siempre se mete donde no lo llaman". Todo lo anterior de forma negativa y despectiva.

Los Adolescentes suelen usar la Música
como una Barrera Energética ante sus Padres

Como pueden leer y para concluir, les quiero acentuar lo básica y, al mismo tiempo lógica que es la metafísica de las enfermedades, que como siempre he dicho (y este tema es un muy buen ejemplo), es para niños.

La guía anterior te puede acercar a hacer diagnósticos más o menos certeros conociendo claro está, el historial de vida del paciente.

No te olvides nunca que el aprendizaje es infinito, y que todo movimiento/desarrollo produce un sonido, y que esos sonidos los debemos escuchar para poder aprender.

Tampoco te olvides de la música, del canto de los pájaros, del sonido del viento, del movimiento de las estrellas, del sonido que produce el caminar o volar de un insecto.

Escucha con amor y no con miedo. Disfruta escuchando. Escucha tus propios pensamientos.
... y protégete de los ruidos, gritos y otras energías negativas que producen algunos sonidos.



Consigue el Libro:
de Damián Alvarez