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| Ángel Yurkemi. Pasiones y Emociones Sanas |
El ángel Yurkemi es el señor de los granizos. Yurkemi enfría el agua de lluvia levantándola con el aire hasta lugares tan fríos que las gotas de agua se congelan
Todos podríamos pensar que los granizos no son nada benefactores y solo causan daño, pero pensad que la naturaleza es sabia y si el agua de lluvia se congela para luego caer a la tierra será porque la tierra y el aire necesitan enfriarse de tal manera que el agua en su estado liquido no lo podría conseguir.
La lluvia es buena pero no las inundaciones. De la misma manera los granizos desmesurados en cantidad y tamaño podrían causar mucho daño a las cosechas y a los seres vivos, pero nunca pensamos que una sequía volvería la tierra árida y podrían haber incendios. Las granizadas enfrían el medio ambiente sin permitir que la sequedad de la atmósfera destruya la vida en la tierra.
De todas formas siempre podemos pedir al ángel Yurkemi que nos proteja y proteja a nuestras cosechas si vivimos en lugares donde regularmente se experimenta el fenómeno del granizo.
Para el ángel Yurkemi, señor del granizo, le es difícil apagar el fuego como lo podría hacer el agua en estado líquido, de echo existe una leyenda que habla del tema y donde Yurkemi se encuentra para enfriar "hornos calientes", pero Yurkemi calma las emociones muy ardientes y ahí su función primordial.
De la misma manera que el granizo puede enfriar la atmósfera sobrecalentada, también Yurkemi puede calmar las emociones agresivas, desmesuradas, impulsivas, lujuriosas.
El Ángel Yurkemi lo único que realmente hace es hacerte pensar y actuar un poco con prudencia, con sangre fría para que no te domine la ira o la cólera, los celos, la violencia y los deseos demasiado apasionados. Yurkemi te hace pensar con la cabeza.
De la misma manera que enfría el agua hasta convertirla en granizo subiéndola con el aire hasta lugares más elevados, así mismo Yurkemi enfría tus pasiones con el intelecto y le pone riendas a tus emociones que se irán derramando por la tierra pero poco a poco, así como se descongela un granizo.
Las personas que deben de pedirle a Dios las bendiciones del ángel Yurkemi serían pues las personas de carácter violento, demasiado impulsivas, ninfomanos y/o perversos.
