El Sanador se conecta Conscientemente a Dios todos los Días de su Vida |
Comentario de un amigo de Buenos Aires, Argentina:
Agradezco que me conectaras nuevamente con
Dios. Lo venia extrañando, y si bien no lo había reemplazado en mi camino de
consciencia, había olvidado conectarlo. Ahora una parte importante de mi ha vuelto a mi. Muchas gracias.
Quien está con Dios siempre está bien Acompañado y bien Protegido |
Respuesta de Damián Alvarez:
Hola Amigo,
¡Qué bueno eso de la re-conexión consciente
con Dios!
Yo, la verdad, te puedo decir que llevo 26
años trabajando para Dios. Algunos trabajan para la Coca Cola, otros para
Telefónica. Yo, trabajo para Dios. te lo cuento porque si me quitan a Dios me
lo quitan todo, mi vida se encontraría vacía y sin significado alguno.
Por otro lado, de forma inteligente, y a lo
largo de los años, no he encontrado alternativa alguna mejor a Dios. Fíjate que
no se trata de "fe ciega de beatos" sino de pura inteligencia.
Mi felicidad se basa en que estoy cerca de
Dios, se quién soy, quien me creó y me siento satisfecho con ello. Aparte de
que he tenido la posibilidad (bueno, también me lo he currado y me lo sigo
currando cada día), de trabajar para el Jefe con mayúsculas, y esto último es
la felicidad completa. De hecho uno de los títulos que me he dado a mi mismo es
el de "amigo de Dios".
La Felicidad es el mejor Pago que se recibe por Trabajar para Dios |
La Sanación es la profesión más difícil del
mundo pero también la más bonita, y la mejor remunerada, y no me refiero
físicamente, sino remuneración sentimental, emocional, mental y espiritual, que
pocos trabajos, quizás ningún otro te pueden aportar.
Trabajando como Sanador estás
"obligado" a estar cerca de Dios a cada segundo de tu vida, ya que es
desde Él de donde provienen las energías sanadoras, el amor. Es a Dios a quien
nos acercamos para pedir que envíe sus energías sanadoras a través de nosotros hacia los demás seres, lugares o hacia nosotros mismos.
La verdad es que siempre es bueno estar Bien
Acompañado y Bien Protegido.
Abrazos amigo
Damián Alvarez