Jesucristo, hasta con su Nacimiento nos da una Lección de Vida |
No cabe duda de que Jesucristo fue el hombre más feliz del mundo, quizás el único hombre feliz del mundo aunque el "sistema actual" lo hubiese "crucificado" de todas formas.
Con el "sistema actual" me refiero al comercial, y a todos los demás sistemas basados en el comercial (en el económico), como pudiera ser el religioso, el militar, el social, el educativo.
Según el "sistema actual", para ser feliz necesitas estar casado, tener hijos, ser joven, tener una cierta marca de coche aparcado en el garaje del adosado, un cierto trabajo de cierta remuneración, y unas cuantas tarjetas de crédito. Eso como mínimo.
Existen muchas más cosas con las que el "sistema" nos educa, nos impregna, nos inculca, para luego acomplejarnos si no tenemos esas cosas, esas relaciones, y vendernos esos productos "mágicos" que nos harán felices. El "sistema" siempre tiene una o varias razones para decirte que "no eres feliz", las busca.
Si tienes familia, el "sistema" te acomplejará con la "felicidad" del hombre solo, joven, libre, seductor, campeón de todas las fiestas.
Si estás solo, el "sistema" te acomplejará con tu soledad, con los grupos de amigos o familias "felices" que comparten sus fiestas unidos en el hogar.
Jesucristo nos Enseña con su Vida el Camino hacia la Felicidad |
Seas como seas, el "sistema" siempre encontrará algo con que acomplejarte. Por supuesto que el "sistema" vende sus productos metidos en el "saco de la felicidad" porque sabe que lo único que el ser humano necesita es ser feliz, realmente vivir con amor: amar y ser amado.
Jesucristo nació en un pesebre, sobre pajas y lo calentaban los animales del establo. Jesucristo creció en el seno de una familia humilde, o sea, una familia pobre. Jesucristo no era rico pero no por ello menos feliz, o alguien se atreve a dudarlo.
Jesucristo no tenía posesiones algunas, de hecho decía que si te pedían la camisa pues regalaras también la capa. Tampoco poseía ninguna casa: "no tengo ni donde recostar la cabeza", decía. El "sistema económico actual" le diría que era un infeliz, pero ¿era Jesucristo infeliz por no tener casa?
Jesucristo se mantenía de las dádivas de las personas de buen corazón, de aquellos que lo invitaban a comer. Jesucristo no tenía dinero pero no por ello menos feliz.
Jesucristo se retiró de su familia biológica, y pensaba que todo aquél que hiciera la voluntad de Dios era su familia. Jesucristo era feliz.
Ni Dinero, Ni Autos, Ni Casas, te harán Feliz sino el Amor |
Jesucristo no tuvo esposa, ni tuvo hijos, a saber, pero no por ello menos feliz.
A Jesucristo le encantaba estar solo, de ahí su retiro en el desierto.
Así, como he dicho en otros momentos, no le crean las mentiras al diablo, entiendan que el diablo es un mentiroso. Jesucristo no tuvo riquezas materiales, ni posesiones, realmente nada de lo que el "sistema" te dice que debes de tener si quieres ser feliz, y por supuesto que Jesucristo fue feliz, ya que cumplió con su misión vital, cumplió con la voluntad de Dios, se realizó como persona ofreciendo su vida para con los demás.
Por lo tanto, no permitas que el "sistema" te diga que es lo que tienes que tener o no tener, como debes de ser o o no ser, para ser feliz, porque lo único que te hará feliz será salirte del "sistema" y no creerle sus mentiras. Se como Jesucristo, se Feliz.
Damián Alvarez