Un Objeto Sagrado es todo aquél que represente a Dios y halla sido venerado por la Fe de los Seres Humanos |
¿Exactamente
que se puede considerar un objeto religioso? La Biblia por supuesto pero no es
un objeto religioso porque es la Palabra de Dios viva y la Cruz por ser
Geometría Sagrada pero ¿qué más?
Un objeto religioso es todo aquél que se utiliza en
los rituales que hacen las religiones.
A mí no me gusta la palabra "religioso"
porque existen muchas "religiones" diferentes. Me gustaría utilizar
la palabra "sagrado", aunque muchos también se lo tomarían a mal, ya
que lo que para unos es sagrado para otros no.
Yo sé que me lo preguntas por lo que he escrito sobre "los actos
impuros" y las personas que utilizan objetos sagrados de forma aberrante
para rebajarlos, despreciarlos, etc. Cuando hablo de un objeto religioso o
sagrado me refiero (aparte de los libros sagrados), a los que representan a
Dios, a su fuerza creadora (el Espíritu Santo), y a su jerarquía espiritual (incluyendo a
Jesucristo).
De todas formas, creo que, un objeto sagrado, es
aquél que simboliza la fe, creencia de un grupo de personas, sus esperanzas,
sus anhelos de paz, amor, esperanza, y todos ellos, aunque pertenezcan a
diferentes religiones se merecen respeto absoluto, y no un trato vejatorio,
cochino, pervertido.
Las Hostias Consagradas representan el Cuerpo de Cristo pero solo durante la duración de la Eucaristía |
Te pongo un ejemplo de mi experiencia vital: Un
sacerdote sueco nos solía regalar hostias cuando hacíamos visitas de estudio a
la iglesia. Recuerdo que la mía la enmarque en un cuadro minúsculo. Era
preciosa porque tenía grabada en relieve la cara de Jesucristo, y la tuve hasta
que se enmoheció y la tiré. Yo le pregunté al sacerdote de cómo regalaba las
hostias cuando los satanistas las usaban para supuestamente hacerle daño a lo
que representaban, o sea, al cuerpo de Cristo. El cura me dijo que esas hostias
no eran sagradas, que no representaban a Jesucristo porque no estaban
consagradas.
Muchos clérigos dicen que los objetos rituales dejan
de ser sagrados cuando salen de la iglesia o si no han sido bendecidos, pero no
es el objeto en sí el problema, o la causa del problema de "acto
impuro", sino la maldad interior (energética), con la que el malvado lo
desempeña. Masturbarse con un crucifijo o defecar sobre la Biblia, por ejemplo,
demuestran el grado de enfermedad (en todos los planos), que padecen ciertos humanos.
En el caso de las hostias, que ciertas ramas
satanistas, las cogen y no se las tragan en la eucaristía (creo que se llama
así), sino se la sacan de la boca para luego, supuestamente, intentar matar al
hijo de Dios, es el planeamiento y consumación de un asesinato en toda regla,
por lo menos a nivel energético.
... continuará
Damián Alvarez