miércoles, 21 de noviembre de 2018

Una Sesión del Sistema de Sanación Tinerfe. Primeros Pasos: Proteger el Lugar, Proteger al Paciente y Protección del Terapeuta (Primera Parte)

La Oración de Protección siempre será la Primera Protección

La protección del lugar se lleva a cabo para que las energías negativas exteriores no se mezclen en la sesión de sanación y puedan desequilibrar, le quiten la concentración, o molesten de cualquier manera, sobre todo, al terapeuta, pero tampoco al paciente.

Ruidos como los de un taladro, perros que ladran, personas que te tocan el timbre de tu consulta, un teléfono que suena, etc., son causa de molestia durante la terapia, pero no queda ahí porque también nos protegemos de las energías negativas de las personas que se puedan estar conectando a nosotros de forma inconsciente (pensando en nosotros), en ese preciso momento, o de forma consciente enviándonos energías negativas como podría suceder durante ataques psíquicos o cualquier tipo de brujería.

Tenga en cuenta que la mayoría de los pacientes que lleguen a su consulta será porque se sienten mal a causa de las energías negativas y debemos separarnos de estas de forma drástica.

También, claro está, nos protegemos, sobre todo de los seres espirituales negativos, que siempre están esperando para molestar y hacer daño durante las terapias de sanación. A los seres espirituales negativos no les interesa que canalicemos amor a nuestros semejantes, y constantemente intentan que no se suceda.

Proteger al Paciente y Protegerse de las Energías del Paciente

Durante las terapias de sanación se suelen deshacer bloqueos energéticos en el sistema de chakras, caminos entre los chakras y aura del paciente, que para eso hacemos la terapia. Hablamos de liberaciones (mal llamadas "emocionales"), emocionales sí, pero también mentales, sentimentales, físicas y hasta espirituales. Hablamos de penas, desamores, traumas, sustos, disgustos, frustraciones, ira, rencor, rabia, odio, dolores, etc. Además se desaceran las energías de ataques psíquicos, las absorbidas de otras personas, animales o lugares por interacción y resonancia energética, brujerías y hasta posesiones. De ahí el por qué del deber y necesidad de las protecciones personales.

La tendencia de las energías negativas es conectarse ("pegársele"), al primer ser que encuentran en su camino de liberación al exterior y ese será el terapeuta, ese será usted. El terapeuta al tener su alma conectada al completo, o en parte (al menos), al receptor de la terapia será el primero en sentir en su propio cuerpo y alma las energías negativas que está deshaciendo del paciente.

No deseo asustar a nadie. Nosotros, los Sanadores Terapeutas del Sistema de Sanación Tinerfe usamos las mismas leyes de conexión energética (Leyes de Interacción y Resonancia Energética), entre dos almas para diagnosticar y tratar al paciente de forma consciente, concisa, precisa, específica, consiguiendo con ello una terapia efectiva y completamente previsible.

Se oye decir por ahí entre personas del gremio, realmente principiantes o persona con muy pocos conocimientos y experiencia en el ámbito, que durante un acto de amor como la sanación no se pueden contagiar energías negativas. También, intentan convencer de que el sanador es un mero canal y que las energías sanadoras se mueven en solo una dirección, o sea, en dirección terapeuta hacia el paciente y por lo tanto el contagio energético es imposible...


... continuará

Damián Alvarez




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Gran Era del Amor