viernes, 6 de enero de 2012

Las Virtudes del Corazón. La Prudencia



La Prudencia es discreta, humilde y segura de sí misma

"Más vale perro vivo que león muerto" cita la Biblia, y nunca antes con tanta razón.

Cuando he dicho que Dios no quiere mártires sino personas vivas que luchen y
trabajen por Él más de "uno" se me ha querido tirar al cuello y no para abrazarme precisamente.

La discresión es un don, que aunque sea un don con minúsculas no deja de ser
tal y tiene mucho y todo que ver con la Prudencia. La persona discreta no se
alardea (síntoma de inseguridad realmente, orgullo y vanidad) con sus triunfos,
sino que deja que los demás se enteren de sus triunfos por terceros. La persona discreta, segura de sí misma, no necesita vanagloriarse, ni la confirmación o el reconocimiento de los demás. La persona discreta no cuenta sus planes antes
de llevarlos a la práctica para no crear envidias y pensamientos negativos
innecesarios de los demás que solo interrumpirian esos planes.

La Prudencia también se debe expresar en nuestras decisiones. No seas impulsivo
en tus decisiones para que no cometas ningún error. Decide en calma, decide con
el corazón y no con la necesidad y las emociones. Tómate tu tiempo para pensar
bien antes de decidir o actuar y para poder rectificar en caso de que te hayas equivocado. No decidas con euforia o apasionamiento, que estos estados nublan
el intelecto y los verdaderos sentimientos. Decide en Paz, decide en calma, no
hagas "locuras".

Prudente es el que no se espera nada de nadie y al mismo tiempo se espera
cualquier cosa.

Pisa firme, mira donde pisas, mira el camino, mira el final del camino. No pises sin
ton ni son porque probablemente caerás. Intenta siempre ver más allá de tus actuaciones y decisiones y de como éstas pueden afectar directa o indirectamente
a otros. Intenta ver la trascendencia de tus sentimientos, pensamientos, emociones
y actos, para que así nunca te tengas que arrepentir de haberle hecho daño a los
demás, a tí mismo o a Dios.

Pisa firme y sigue tu "camino" con humildad y discreción

Ten perspectiva y claridad mental. No te dejes envaucar por los que deseen venderte "cinco duros" a peseta. Una vez escribí que "las ayudas que no se necesitan suelen
ser las más caras" y también "es más falso el que habla bien de tí sin conocerte que
el que habla mal conociéndote" Desengañate, los atajos no existen, todos debemos recorrer el mismo camino, pero sé prudente con los que te ofrezcan atajos porque
lo más probable sea que te pierdas. Peor aún si tu en tu imprudencia haces que se pierda otra persona, porque está escrito: " Pobre de aquél que haga que se pierda
uno de los mios, más le valiera no haber nacido" dice Dios.

Jesús dijo que tuvieramos cuidado (fueramos prudentes) que nos enviaba al mundo como corderos entre lobos. También "que tu mano derecha no se entere de lo que
hace tu izquierda" expresión de discresión total.

Esperanzadoras las palabras de Dios, viendo el mundo como está hoy en dia lleno
de farsantes, envaucadores, falsos profetas y mentirosos, "no os preocupeis de los
que pueden dañar vuestro cuerpo pero no vuestra alma" y "¡Hay del que le toque un
pelo al más pequeño de los mios!" No te dejes llevar por promesas mundanas, que mueven
tus sentimientos pero destrozan los cimientos de tu Fe. Haz todo por Dios y para
Dios
y Él te enseñará a vivir de forma prudente, porque Dios no necesita alardeos ni reconocimientos, Dios es prudente porque Dios es Amor y realmente sólo el miedo
nos hace indiscretos e imprudentes.
Gran Era del Amor