domingo, 23 de octubre de 2011

Encarnación y Transformación Humana. Un modelo multidimensional de la Evolución de la Conciencia

Sai Baba

El ser humano no es solo un Cuerpo Físico (como ya hemos visto), sino un ser energético en continuo desarrollo.

El plano físico (llamado también "laboratorio de la vida") es solo una manifestación de nuestra esencia multidimensional. La encarnación explica como se expresa esta esencia multidimensional de cuerpos energéticos en el plano físico.

Según las "leyes" de la encarnación nos encarnámos para poder experimentar nuestra esencia en el Cuerpo Físico. El plano físico (espacio-tiempo) es solo un "vehículo" por el cual aprendémos.

El plano físico no es la vida, sino una "vida aparente". Esta "vida aparente" (el mundo) es solo una creción ilusoria de nuestros limitados sentídos. La verdadera realidad y el mundo que percibimos no son la misma cosa. Este mundo que percibimos es solo un mundo de apariencias.

Los cuerpos sutíles, campos energéticos forman el Cuerpo Físico para que la Conciencia Superior se pueda expresar. Existen investigaciones que apoyan esta teoria, como los trabajos de Kim Bong, que descubrieron que los Meridianos de Acupuntura eran anteriores a los órganos físicos. El famoso clarividente inglés Geoffrey Hodson también halló que el Cuerpo Etéreo precede a la formación del feto.

Pero sigámos, las experiencias y enseñanzas adquirídas en el plano físico se almacenan en los cuerpos sutíles, con el fin de que la Conciencia Superior evolucione de forma espiritual. Así pues la encarnación en el plano físico es el medio que la Conciencia utiliza para desarrollarse espiritualmente.

La encarnación no funciona al azar, sino que es el Alma la que elige donde, cuando, de que manera y bajo que circunstancias desea encarnar. Todo en cuanto elegir las mejores circunstancias para desarrollarse espiritualmente. Enfermedades, pobreza, etc., "las elige" el Alma como medio para mejorar espiritualmente.

Aunque no recordémos la "vida" anterior a esta vida, esas enseñanzas estan ahí, almacenadas en nuestros cuerpos energéticos: el Cuerpo Astral sirve para almacenar nuestra personalidad, el Cuerpo Cetérico almacena nuestras experiencias y el Cuerpo del Alter Ego, (el yo superior) es la suma de todo lo experimentado y aprendido en el plano físico. Los Cuerpos Mental, Emocional, Etérico y Físico los abandonámos en el momento de la desencarnación.

Nuestros cuerpos energéticos superiores tienen pues, la finalidad de preservar el conocimiento obtenido en la vida física. El alma realmente está (al menos en parte), por lo tanto, compuesta de niveles superiores de sabiduría.
Gran Era del Amor