Jesucristo, en sus andaduras por la tierra, nos dió una oración que, según sus propias palabras era Perfecta. Una oración que recorría toda nuestra Alma y Espíritu, osea todo nuestro Sistema de Chakras.
En ésta oración le pedimos al Padre (Dios) que está en los cielos (chakra Corona) "cosas" espirituales y fisicas.
En el Tercer Ojo y Garganta le pedimos a Dios "cosas" espirituales.
En el chakra Corazón (la Frontera Astral) le pedimos a Dios cosas espirituales y físicas: “Hágase Tu Voluntad así en la tierra como en el cielo”.
A partir del Plexo Solar le pedimos a Dios cosas materiales como los alimentos fisicos y comprensión sobre nuestras emociones.
Al final como en cualquier oración perfecta le pedimos a Dios que nos proteja.
El “Padre Nuestro” es un recorrido por nuestros chakras y existen muchas formas de rezarlo, pero se podría recitar la Oración completa "sobre" nuestro Sistema de Chakras o "sobre" un chakra determinado al que iluminaríamos de Luz durante un determinado periodo de tiempo para limpiarlo energéticamente y sanarlo y así "sobre" cada chakra sucesivamente hasta Sanar nuestro Espíritu y Alma por completo.